La plastilina se trabaja a través del modelado, de la manipulación y el calor que desprenden nuestras manos al trabajar con ella, que nos permite darle la forma que deseamos poco a poco, por ello es un material muy utilizado en infantil y con el que podemos potenciar el trabajo de la psicomotricidad fina y la coordinación óculo-manual.
Aún así es un material que tienen que trabajar los niños siempre bajo nuestra supervisión y sobre todo cuando la edad lo permita, es decir, con bebés el uso de la plastilina es poco viable.
En las edades más tempranas dejamos modelar a su antojo y sobre todo observaremos churros y bolas realizadas con pequeños pedazos de material, conforme la edad de los niños avanza el trabajo de la plastilina en clase es más amplio. También sería aconsejable darles a los niños/as como siempre un plus de interés sobre la temática, realizando exposiciones o fotografías que luego colguemos en clase con las piezas modeladas.
Un ejemplo de algunos de los trabajos que podemos realizar con nuestros alumnos/as son:
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